a. No comprar o adquirir bienes culturales de dudosa procedencia.
b. Tener cuidado ser timado con falsificaciones de obras de arte.
c. Exportar todos los bienes con la documentación establecida para que no sean decomisados.
d. Denunciar ante cualquier daño o vandalismo que usted vea a los inspectores de cultura, policía o al propio Registro de Bienes Culturales.