Un busto del relevante pensador cubano, Fernando Martínez Heredia, Premio Nacional de Ciencias Sociales recientemente fallecido, fue develado en la Casa del Caribe, en Santiago de Cuba, a la cual estuvo ligado en su quehacer académico e investigativo.
Esa ceremonia se insertó en el XI Coloquio Joel James In Memoriam que finaliza mañana tras jornadas de conferencias y análisis acerca del legado del director-fundador de esa institución y de los Festivales Internacionales del Caribe, cuya edición 38 tendrá lugar en la urbe en julio próximo.
La pieza escultórica fue realizada por el artista José R. Montero, del Taller Cultural Luis Díaz, y estará situada en la sala Antonio Guiteras y muy cerca de la que reproduce la imagen de José Martí.
Junto a la del propio James y las del actor Rogelio Meneses y el poeta Jesús Coss Causse, esa obra de Martínez Heredia refrenda la vocación caribeña y latinoamericanista de la cultura nacional y sobre todo la defensa de sus raíces autóctonas expresadas en tradiciones populares.
También enriquece el legado de las artes plásticas en la entidad, donde quedó inaugurada también una exposición de pintores santiagueros para evocar a James y se ubicó el segundo Árbol de la Vida en Cuba, tras una donación de artistas y autoridades de la ciudad mexicana de Metepec.
Esther Pérez, compañera en la vida de Martínez Heredia, agradeció el gesto y tras resaltar sus estrechos lazos con la Casa del Caribe aludió a la coincidencia de que el busto se ubique en la sala nombrada por un revolucionario que fue paradigma e inspiración en su obra historiográfica y política.
Una conferencia del doctor Ernesto Limia enfatizó en los aportes del ensayista al pensamiento social de la Revolución Cubana y en su valor y vigencia en las complejas circunstancias del mundo actual y las realidades del país.
