En éste medio siglo, una persona en particular marcó para siempre los destinos del naciente Circo Nacional de Cuba. Sus suaves manos han llegado a la frente de cada cubano para bendecirlo. Es como el angel que espera a cada recién nacido y en el primer llanto le concede paz, seguridad, salud, educación e igualdad de derechos.
Ha sido el circo una de las artes escénicas que mucho apoyó y lo sigue haciendo desde la eternidad. Él estuvo en su institucionalización y saludó a los artistas y les agradeció por el pueblo.
Por su intención de grandeza, los primeros exponentes formados en una escuela cubana fueron enviados a Moscú. Luego al regreso ya estarían las condiciones más que creadas para el acto fundacional de la Escuela Nacional de Circo, -una de las más prestigiosas de América y del mundo-.
Gracias a él recorrió el mundo, el naciente Circo Nacional de Cuba y múltiples artistas conquistan hasta nuestros días, lauros en arenas muy difíciles de obtener.
Hoy que ya no contamos con sus consejos oportunos y su entrañable presencia física, seguimos siendo fieles a ese legado que confió para que el Circo Nacional fuera orgullo de América, para que Cuba tuviera, a los que son considerados entre los mejores artistas de su tipo en el mundo.
Ahora también su nombre queda escrito en letras doradas que hoy festejamos en éstas cinco décadas de existencia. Muchos podrían estar en éstas fotos captadas por el fantástico lente de Alfredo Cannatello. Muchos quisieran ser protagonistas en ésta mañana en que simbólicamente los artistas de la gira nacional CIRCUBA 2018 VIAJA POR CUBA, en nombre de los miles que han pisado las pistas del circo, llegaron hasta el Cementerio Santa Ifigenia donde reposan sus restos.
Donde quiera que estés…. GRACIAS FIDEL en nombre del Circo Nacional de Cuba y de todos sus artistas y trabajadores.
